Duelo de titanes
En 1917, tras una fuerte discusión entre los generales uruguayos Bustamante y Mendoza, éstos decidieron lavar la afrenta en el campo del honor.
Se escogió un parque público de Montevideo con enfrentamiento a pistola. Comparecieron ambos contendientes con sus respectivos padrinos y colocados espalda con espalda recorrieron los 25 pasos de rigor. En el momento fijado la emprendieron a tiros, en total 37, sin que ninguno de ellos recibiese la menor herida de bala. Y digo de bala porque el perro de uno de los duelistas, indignado ante tan poca puntería, hincó los caninos en las posaderas del adversario de su dueño. Al final se aclaró el misterio… ambos generales habían olvidado ponerse las gafas. Tampoco hay que descartar la posibilidad de que ninguno de ellos tuviera mucho afán por hacerse pupita.