Dos canciones de amor-desamor
¿Y cuál no lo es? Es tiempo de amor, como cantara Danza Invisible:
«Arrástrame hasta ti que yo me dejaré, mi instinto puede más».
Dos canciones sobre amor y desafectos, diríase que escogidas al azar si no fuera porque por razones difusas confluyen ahora dentro de mi cabeza resonando su ecos.
La primera de Jackson Browne, hombre comprometido y cantor en toda la extensión de la palabra. La segunda de John Watts, voz de Fischer-Z, pone el contrapunto desgarrado.
Jackson Browne: I’m Alive (1993)
«Ruedo por la autopista 5 de California
con tu risa en mi cabeza.
Tendré que arrancarla de mi
si de algún modo quiero sobrevivir,
porque aquellos sueños están muertos
y yo estoy vivo.»
«Ahora podría llenarse una piscina con todas mis lágrimas saladas
Solías decirme que yo estaba en tu corazón,
pero era mentira.
Pensé que eso me mataría
pero estoy vivo,
sigo vivo».
Fischer-Z: Still In Flames (1992)
«He tenido tu amor,
lo tuve antes,
pero eso no significa mucho más
y ya no vale la pena luchar por ello».
«Sentí tu toque,
sentí aquellas manos
pero eso no significa mucho más
espero que lo comprendas»
«La vida continúa y yo
aún sigo en llamas…
todavía ardo por ti».
Hoy yo he querido entender así la letras.