Entre aproximadamente 1976 y 1980 la música de Boney M. llegaba a todos los rincones. Así lo recuerdo yo: desde los barrios urbanos al pueblo más apartado, colándose con fuerza en casas, talleres y otros lugares de trabajo, reinando en fiestas y discotecas y sonando en la radio sin parar. Apoyados en muy buenos arreglos
Aunque suene paradójico, una banda puede ser notoria en cuanto a influyente, pese a un amplio desconocimiento popular. Y si no preguntadme por Violent Femmes, uno de los grupos musicales más originales de su época cuyo sonido nos pilló de sorpresa y nos atrapó.
Los californianos Social Distortion han sido un referente del punk norteamericano desde 1978, aunque siendo más precisos lo que hicieron fue reconciliar distintas músicas patrias, como rockabilly, country, blues y por supuesto punk, hasta conformar un estilo que no se acerca al de otras bandas del área de Los Angeles.
The Wrecking Crew fue un apodo acuñado por el batería y músico de sesión estadounidense Hal Blaine para designar a un colectivo de músicos de estudio que tocaron de forma anónima en muchas de las más famosas grabaciones musicales californianas durante la década de 1960 y parte de los 70. Sus arreglos y bases rítmicas
Cualquier composición de Bruce Springsteen posee tal contenido humano que para cada momento de la vida alguna de sus canciones parece estar esperándonos. Por algo es el cronista más grande de la música. ¿Puede todo el amor de un hombre hacia una mujer, todo el dolor por su pérdida, concentrarse en una canción? La respuesta
Todo el mundo conoce cómo suena el punk: acelerado, sin pulir, con guitarras cortantes y una línea de bajo arenosa y voces gritando agresivas. Para sus protagonistas, bandas y seguidores, el punk conformaba una identidad juvenil de ira, rebeldía y provocación. El punk explotó como un nuevo movimiento manifestado en la vestimenta y el estilo
Viendo True Detective, que discurre en Louisiana con Woody Harrelson y Matthew McConaughey como magnífica pareja protagonista, podemos evocar la particular belleza del sureste de Estados Unidos, dulce y decadente, con esa marcada identidad que ha dado tantos frutos en la literatura, la música y el cine.
En la década de 1980 muchos discos de importación norteamericanos que entraban en Europa procedentes de compañías independientes apenas llegaban a emisoras de radio generalistas, mucho menos a la televisión. Existían entonces corrientes más reconocibles para el gran público, simples y digeribles, comenzando por el tecno en sus cien variantes y continuando con las bandas
En la excitación de sus primeros y juveniles años, los Manics lograban atraer el foco de la prensa musical al tiempo que la antipatía de otras bandas por sus comentarios radicales y soberbios. Los de Gales eran una de las bandas más explosivas antes de la extraña desaparición de Richey Edwards. Luego, como es de