Viago, Deacon, Vladislav y Petyr comparten piso de alquiler en Wellington (Nueva Zelanda), intentan sin ningún éxito repartir las tareas domésticas y salen por los clubs nocturnos de la ciudad. Todo normal, excepto por un detalle: son inmortales y necesitan alimentarse de sangre humana cada día, quiero decir, cada noche. Porque todos ellos son vampiros.
«La creencia central es que el Monstruo de Espagueti Volador, invisible e indetectable, creó el universo después de beber mucho. La borrachera del monstruo explica las imperfecciones del mundo creado.» Uno de los principios del Pastafarismo La legalización en España de la verdadera religión está en camino. ¡Qué mejor forma que demostrar lo absurdo de
La armónica de cristal fue inventada por Benjamin Franklin en 1761 inspirado por el sonido que emiten las arpas de cristal, copas de cristal que, dependiendo de la cantidad de agua que contengan, emiten determinada nota al ser su borde rozado con las yemas de los dedos húmedas.
Es muy probable que una mañana cualquiera de un día cualquiera te dirijas al trabajo en tu ciudad y de pronto te encuentres metido dentro de una perfecta formación militar de una de las tropas de élite más terroríficas que hayan existido jamás: la Legión 501.
La de Mothman es una de las más enigmáticas y al mismo tiempo curiosas historias sobre seres sobrenaturales. El patrón que sigue su aparición parece estar más próximo a una leyenda urbana que a sucesos reales. No obstante, veamos una crónica de aquellos acontecimientos.
Soy tal pedazo de profesional triunfador que me abro paso entre un mar de sonrisas complacientes. Quemé algunas etapas del diseño gráfico antes de aprender a dirigir con gran y dinámica simpatía una empresa propia con decoración minimalista en el centro de la ciudad. Con los contactos adecuados siempre esperan jugosos contratos, nuevas oportunidades se
Fue la mía hace décadas una familia de tratantes y chamarileros. No sé cómo, un día mi padre consiguió introducirse en el sector de artes gráficas madrileño, se relacionó con algunos poderosos, trabajó duro, procreó generosamente y dejó una empresa próspera a su muerte. Desde entonces mis innumerables hermanos y yo continuamos su legado aplicando
Oiga, no es que yo lo quisiera, pero desde que papá se embarcó en negocios de envergadura hube de reciclarme para seguir su ritmo y asentar la idea de que también yo sería gentleman empresarial de la noble escuela de saqueadores hispánicos. Procedo de una zona pija del norte de Madrid y a día de