No es lo mismo un idiota, que un estúpido o que un imbécil
Actualmente apenas diferenciamos entre estas palabras; a las tres genéricamente venimos a darle el mismo significado, es decir, «tonto del culo». Pero en la realidad, y partiendo de sus orígenes, cada una de ellas significa cosas bastante diferenciadas.
Reconozco que cuando una persona se hace merecedora de uno de estos adjetivos, lo normal es que se le pueda aplicar por extensión cualquiera de ellos. Pero en esta entrada vamos a aclarar lo que es de verdad un estúpido, un imbécil y un idiota, para que de este modo cuando insultemos a alguien podamos hacerlo con propiedad.
Por ejemplo, idiota proviene del griego Idiotes, palabra con la que se designaba a las personas inexpertas o profanas en algún tema o profesión.
A lo largo de los siglos el significado fue variando hasta que en el siglo XII entró en nuestro idioma proveniente del francés Idiot que significa persona ignorante. Es decir, un idiota es un ignorante. Aunque el sujeto es consciente de lo que hace, lo hace de todas formas porque su sentido común no le da para hacer otra cosa más inteligente. No da para más.
Véase el ejemplo de la foto inferior.
Luego tenemos imbécil, que procede del latín imbecillis y significa «persona débil o enjuta» y aunque en principio hacía referencia a una dolencia física, con el devenir del tiempo cambió para definir un mal mental.
El imbécil también es consciente del acto que está realizando, sin embargo, lo ha planeado y desarrollado. Por ejemplo:
Por último nos queda estúpido, cuya palabra viene también del latín stupidus. Significa sorprendido o asombrado (de ahí «estupefacto»).
Los mismos romanos empezaron a aplicarla de modo despectivo a aquellos que son un tanto timoratos o se asombran por todo.
Es decir, se llama estúpido a toda persona que realiza una estupidez fruto de ese pasmo, un acto que no necesariamente provoca un mal a alguien pero que ocurre por una carencia de sentido común en el individuo que lo realiza.
Así que ya lo saben, queridos lectores: para no parecer un estúpido (pasmado) y terminar convertido en un imbécil (débil mental), lo mejor es no ser un idiota (ignorante).