Impresoras en 3D. Imprimir objetos sólidos
Las impresoras 3D son una tecnología desarrollada por el MIT (Massachusetts Institute of Technology) para transformar archivos de tres dimensiones en prototipos reales.
Del mismo modo que una impresora convencional es capaz de imprimir una hoja de papel con los esquemas realizados en un programa convencional, las impresoras 3D son capaces de dar cuerpo a los diseños en 3 dimensiones creando de ese modo figuras «solidas».
Impresoras como el modelo comercial ZPrinter 450 construyen piezas a partir de los datos de un archivo CAD. La pieza se fabrica capa a capa. La geometría del modelo se construye esparciendo una capa de polvo, imprimiendo una sección horizontal de la pieza y después repitiendo el proceso (esparcir polvo e imprimir sección) hasta terminar la pieza.
Las capas se construyen una encima de otra hasta que la pieza se completa. La geometría de la pieza se soporta gracias al polvo plástico «no-impreso», lo que permite un amplio rango de de complejidad en las piezas.
Esta tecnología no necesita estructuras de soporte durante la fase de construcción, ya que el polvo cumple esa función hasta que la pieza se desentierra de la cubeta de fabricación.
Son múltiples las aplicaciones de esta tecnología y en campos muy diferentes. Actualmente se utiliza en industrias como automoción, diseño de calzado, arquitectura, packaging, medicina, educación o topografía.
Estas impresoras ofrecen además la ventaja de ser silenciosas, poseen aspiradora especial para que no se escape el polvo, sistema de sustitución de cartuchos como en impresoras tradicionales y uso del color y materiales económicos, polvo y aglomerante, para funcionar.
Son máquinas que hacen en horas el trabajo de varios días.
De momento, por su alto precio no se plantea como una tecnología de consumo pero quién sabe si cuando los precios bajen se le da una aplicación más hogareña y particular.
Como utilizador, tiene alternativa cuando se trata de comprar nuevos cartuchos de renovacion de tinta. Es una creencia común de que los utilizadores son obligados a adquirir costosos cartuchos de tinta originales del fabricante o la garantía de la impresora será caducada. Esto no es asi – por ley, el uso de cartuchos de repuesto compatibles que no anulará la garantía de la impresora. Puede, eligen por comprar cartuchos de tintas compatibles más baratas o cartuchos remanufacturados, a menudo realizando un ahorro de entre el 50% y 75%. Todas las empresas de cartuchos de inyección de tinta más importantes tienen versiones de cartuchos de tintas compatibles, como Apple, Canon, Hewlett Packard, Lexmark, Brother, Epson, IBM y Xerox.