11/04/2007
El rey de la pluma
Se celebraba la cabalgata de los Reyes Magos en Sevilla y el premio nobel de literatura Jacinto Benavente oficiaba como rey Melchor. De pronto se oyó un grito entre la multitud:
– ¡Viva el rey de la pluma!
Don Jacinto se inclinó agradeciendo el cumplido pero en seguida se pudo escuchar:
– No, hombre, no, si no es a ti… ¡Es al tío que tienes al lado, el de la pluma en el gorro!